Todo comenzó en el 2010. Yo tenía 14 años y él (Guillermo) 15 años fue mi primer amor. Estaba demasiado enamorada de él, pero un día me trato mal en público y supuse que eso era el fin. Me pidió disculpas, pero ya no íbamos a estar juntos.
El año siguiente nos cambiaron de salones y casi ya no hablábamos, pero ya para septiembre a octubre comenzó a buscarme. Cuando se enteró que yo estaba con un chico de mi salón, estaba decidido a que volviera a pasar algo entre los dos y lo logró.
Después terminó el colegio, también aquella relación, pero a Guillermo aún lo seguía viendo, hasta que poco a poco comenzó a alejarse y yo me mudé y no supe nada de él. Conocí a otro muchacho, comenzamos a salir, nos hicimos buenos amigos y posteriormente novios. Con él sentí que habia vuelto a enamorarme La relación fue muy bonita al comienzo, pero después comenzamos a tener problemas que supimos superar. Actualmente tenemos diez meses juntos.
Lo valoro mucho porque con él he aprendido muchas cosas, pero hace poco regresó Guillermo a mi vida. Nos encontramos, conversamos y nos besamos. Nos seguimos viendo un par de veces en los que pasamos cosas bonitas y recordamos cosas bonitas. Me dijo que no se podía seguir engañando, que yo le gustaba demasiado, que me quería mucho y porque fui muy especial para él, me pidió disculpas por las veces en me hizo sufrir. Fue muy bonito recordar esos momentos.
Un sábado nos encontramos en una reunión de nuestra promoción, conversamos y me contó que terminó con su enamorada porque ella desconfiaba demasiado de él. Comenzó a hablar demasiado bonito. Me dijo que había puesto todo de su parte en esa relación, sentí que ya había madurado y que ese era el Guillermo que tanto había esperado. Tenía muchas ganas de decirle que lo quería, pero no lo hice. El día siguiente hablamos por chat, quise decirle las cosas que comencé a sentir, pero comenzó a decirme que estaba mal por lo de su ex-enamorada y eso evitó que se lo dijera
No sé qué hacer si decirle o no. Por una parte no me quiero apurar, porque presiento que volveremos a estar juntos, tal vez no ahora, pero que algún día Dios volverá a unirnos para siempre. Espero que sea así, porque el primer amor es el mejor amor.
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